Más manías: Lavado de nariz

Resulta que nací con el don (o la maldición) de un sentido del olfato desarrolladísimo, más que mi vista o mi oído. Es super padre porque identifico a las personas por su aroma único, soy un excelente catador de comida y bebida, siempre puedo descifrar cada uno de los ingredientes de un platillo. Ahora viene la parte mala... Los malos olores, que pueden ser ligeramente incómodos para la mayoría de la gente, son INSOPORTABLES para mí, me he tenido que acostumbrar a dejar de respirar o respirar por la boca para evitar vomitar en muchos lugares y situaciones... La semana pasada esta característica mía se vió mezclada con otra de mis manías; como ya había contado, me obsesiona la limpieza, no solo en las manos, sino que limpio mis orejas con gran dedicación. Esta manía me provocó una infección en el oído, y lo que más me molestaba no era el dolor o la sordera... el problema era que el olor de la infección me llegaba a la nariz!!! - Fue cuando decidí visitar al otorrino... Este sentido tan desarrollado que tengo me guía hacia otra manía: Lavo mis fosas nasales con un producto llamado Sterimar diariamente, ya que no soporto el olor de mi propia nariz al final del día, ya que sabrán que funciona como un filtro para las partículas que están presentes en el aire que respiramos. Lo bueno es que existen este tipo de productos, antes de saber que existía, en un día de desesperación mientras me bañaba, decidí que no podía seguir con mi nariz sucia y decidí meterme jabón en la nariz... no quiero contarles el dolor que esto causa. No lo intenten en casa.